Ser luterano significa...
… creer lo que enseñan los antiguos credos: que Dios Trino es nuestro Creador, Salvador y Santificador;
… ser salvos sólo por la fe, una fe que es don de Dios y que permite hacer nuestros los méritos conseguidos por la obediencia y muerte de Cristo;
… confiar sólo en la gracia y el favor de Dios en Cristo, no en nuestras propias obras y méritos;
… recurrir sólo a la Escritura como fuente y autoridad en cuestiones de fe;
… buscar a Dios y su obra en la Palabra y los Sacramentos ya que a través ellos el Espíritu Santo actúa entregándonos los dones de salvación;
… saber distinguir las enseñanzas de las Escrituras como ley (lo que Dios exige) y como evangelio (lo que Dios regala);
… distinguir el reino espiritual de Dios (el modo en que Dios gobierna a la iglesia por el evangelio) del reino de poder (el modo en que gobierna el mundo);
… consolarnos en el Dios que se revela en la cruz de Cristo y no en el Dios que la razón percibe en la experiencia diaria;
… vivir libres en Cristo para servir y amar a nuestro prójimo, esto es, vivir en Cristo por la fe y en el prójimo por amor;
… vivir en arrepentimiento diario, reconociéndonos pecadores, regresando a nuestro bautismo para ahogar nuestra vieja naturaleza y para vivir como nuevas criaturas;
… vivir nuestra fe según nuestra vocación, buscando la gloria de Dios y el bienestar del prójimo en todo lo que hacemos;
… considerar como normativa la interpretación que las Confesiones Luteranas, contenidas en el Libro de Concordia, hacen de las Escrituras.